¿Qué puedo hacer para relajarme?

El estrés constante puede afectar tu sistema inmunológico, aumentar la presión arterial y contribuir a problemas cardíacos. Relajarte puede ayudar a prevenir estas condiciones, así como facilitar el dormir mejor y mejorar tu salud en general.

Las técnicas de relajación son una excelente manera de ayudar a controlar el estrés, no se trata solo de tranquilidad o de disfrutar de un pasatiempo, sino que es un proceso que disminuye los efectos del estrés en la mente y el cuerpo. Aprender técnicas de relajación es fácil, generalmente son gratuitas o de bajo costo, presentan poco riesgo y pueden realizarse casi en cualquier lugar. Hay varios tipos de relajación:

• La RELAJACIÓN AUTÓGENA que consiste, por ejemplo, en repetir palabras o sugestiones en tu mente que te ayuden a relajarte y reducir la tensión muscular, o centrar tu atención en sentir las diferentes sensaciones físicas, como relajar de a uno cada brazo o pierna.
• La RELAJACIÓN MUSCULAR progresiva consiste en contraer suavemente y luego relajar cada grupo muscular, para que dirijas tu atención a la diferencia entre la contracción y la relajación del músculo, de preferencia en un ambiente tranquilo sin interrupciones.
• VISUALIZACIÓN.En esta técnica de relajación, puedes visualizar imágenes mentales que te trasladen a un lugar o situación tranquila y relajante, intentando incluir todos los sentidos que puedas.
• Hay otras técnicas de relajación como la respiración profunda, los masajes, la meditación, la práctica de taichí y yoga, musicoterapia, aromaterapia, hidroterapia, entre otros.

En general, las técnicas de relajación implican centrar la atención en algo que te calme y aumente la conciencia de tu cuerpo. No importa que técnica de relajación elijas, lo importante es que trates de practicar la relajación regularmente para cosechar sus beneficios. No sustituye un proceso terapéutico, sin embargo, la relajación puede ser un excelente aliado para manejar de forma más saludable el estrés del día a día.