Regreso a la oficina después de vacaciones

Volver a la oficina después de vacaciones puede despertar emociones mixtas: ilusión por reencontrarte con tus compañeros y, a la vez, ansiedad por la nueva normalidad. Descubre estrategias prácticas para adaptarte de forma positiva y cuidar tu bienestar en esta etapa de transición.

Después de tomar varios días de vacaciones, debemos prepararnos para regresar a las oficinas. Para algunos, esto representa una oportunidad positiva: la convivencia, la rutina y la cercanía con su equipo de trabajo.

Sin embargo, para otros, la sola idea de volver a la oficina puede generar ansiedad laboral o miedo. Estas emociones son normales y es posible gestionarlas con estrategias sencillas.

En el PAE te compartimos seis sugerencias para facilitar tu adaptación al trabajo después de unas largas vacaciones:

1. PLANIFICA TU REGRESO

Antes de reincorporarte por completo, ajusta tus horarios de sueño y alimentación para alinearlos con tu jornada laboral. Si es posible, organiza un programa progresivo que te permita adaptarte poco a poco. Una planificación consciente disminuye el estrés y te ayuda a retomar el ritmo de manera más eficiente.

2. INFÓRMATE SIN SATURARTE

Ponerte al día con los pendientes es importante, pero evita sobrecargarte de información. Prioriza los datos relevantes y verificados para mantener una perspectiva realista y no dejarte llevar por rumores.

3. VALORA LO POSITIVO DEL REENCUENTRO

Regresar a la oficina también significa reconectarte con compañeros de trabajo con los que compartes una buena relación.

4. MARCA LÍMITES CLAROS ENTRE TRABAJO Y HOGAR

Uno de los beneficios de volver a la oficina es recuperar las fronteras físicas que ayudan a separar la vida laboral de la personal. Esto favorece la desconexión al final de la jornada y permite un descanso más reparador.

5. INTEGRA ACTIVIDADES QUE TE MOTIVEN

Para mantener la energía y la motivación, incluye en tu día ejercicios de relajación, pausas activas o actividades que disfrutes. Estos momentos ayudan a contrarrestar el estrés y a mantener una actitud positiva, especialmente en los primeros días de regreso a la oficina.

Volver a la oficina tras las vacaciones es un proceso de adaptación que, con la actitud correcta y herramientas prácticas, puede ser una oportunidad para crecer, fortalecer relaciones y retomar proyectos con nueva energía.